El uso de acondicionador es algo que recomendamos solo para quienes no tienen problemas de calvicie, con el fin último de facilitar el cepillado, peinado y otros procesos posteriores al lavado del cabello. Ya que el acondicionador causa una apariencia de volumen reducido en la cabellera, resulta contraproducente entre quienes buscan combarit la calvicie.
En primer lugar es importante elegir una solución de acondicionamiento diseñada para el tipo de cabello propio: color, grosor y tipo de crecimiento, entre otras. Esto además debe ir de la mano de consideraciones como el uso de tinte o tratamientos químicos permanentes, así como otros que se llevan a cabo para la restauración de cabello dañado, así como el consejo de algún experto. Su uso no es recomendado todos los días, pero sí varias veces a la semana.
Es importante notar que muchos productos que se hacen llamar acondicionadores, también incluyen soluciones o aspectos añadidos, para más problemas de cabello. Por ejemplo, en el caso de rizos cortos, no solo se usará uno para cabello rizado, sino debe considerar si es graso, tiene tinte artificial, está dañado de alguna forma o reseco en general.
El uso de acondicionador realmente sirve para reponer los aceites perdidos durante el lavado con shampoos con sulfatos. Estas grasas naturales sirven para mantenerlo desenredado y capillarlo con facilidad, pero la mayoría de los shampoos las eliminan.
Además de elegir la solución de acondicionamiento adecuado, también es importante un shampoo adecuado, para un tratamiento completo. De hecho muchas personas que utilizan shampoos sin sulfatos pueden prescindir del uso de acondicionador, o solo lo usan una vez a la semana. Es importante probar distintas opciones para encontrar la más satisfactoria ante el estado actual del cabello, y cambiarla si algo en el cabello es modificado por gusto (color, corte, etc.) o por la naturaleza (caída, canas, etc.).
Pasos para aplicar acondicionador
- Lavar el cabello con agua tibia o frescay shampoo adecuado.
- Enjuagar bien el cabello.
- Secar el exceso de agua con una toalla.
- Tomar la cantidad adecuada de acondicionador y aplicarlo con cuidado en el cabello. Asegurarse de que de que todos los cabellos estén bien cubiertos con el producto, aunque no es necesario que cubran hasta la raíz.
- Perinar con un peine de dientes anchos para permitir que el acondicionador se extienda uniformemente.
- Esperar alrededor de 5 minutos (o la indicación que tenga la etiqueta del producto) y enjuagar el cabello nuevamente con agua tibia o fresca. Cabe destacar que algunos tratamientos a profundidad piden ya sea en el shampoo o acondicionador, que la espera sea de hasta 30 o 40 minutos, pero no es lo común con la mayoría de los productos.
- Finalmente usar una toalla para secar el exceso de agua.